lunes, 22 de enero de 2018

Epílogo ☔


Hoy he vuelto ha despertar de una larga noche disfuncional. Entre heridas y un paño de lagrimas a cual no suelto jamás.

Me encuentro rodeado por aquella soledad que siempre estuvo aquí, pero ahora dice presente cuando te fuiste de aquí. La que con sonrisa calmada sabe que regreso una vez más.

Son tan escazas las mentiras, tan olvidable los momentos vividos. Que me derrumban una vez más entre un corazón desdichado y nunca que otra vanidad.

Las mismas heridas en la piel, las mismas desdichas que pase, todo renacido y resurgido por esa persona que jure proteger.

Y la huida más sencilla, el sentir sangre en mis muñecas. Es más que llamar tú atención, es sentir que aun vivo.

Me divierte jugar con la muerte, puede ser tan sencilla como la vida misma. esto ya no depende de mi, es entre la muerte y yo.


Pienso esto sentado de noche en un banquillo mientras estoy maldito por el olvido, con un revolver en el bolsillo. De rencor lloraba, quizás por la soledad que me acompañaba solo interrumpida por un padre que en alcohol se ahogaba.

Miraba el suelo mientras sacaba el cañón y apuntaba al nudo que mi cuello asfixiaba. Casi sentí no ser yo el que controla mi cuerpo, no puedo ser yo porque no quiero esto.

Y cuando solo pensé en no pensar nada, oí la voz de un hombre que se acercaba. Llevaba lentes oscuros y un bastón que lo guiaba, me pidió fuego y luego se sentó donde yo estaba.  De forma disimulada guarde el alma de nuevo, me seque la frene y le segui la corriente a aquel ciego.

Él me dijo un comentario de las estrellas, de la naturaleza y de la luna. dijo que hay cosas bellas que aprecia mejor ahora que no ve por causa de un cáncer sin cura; como la piel desnuda de tu pareja en tus brazos, como brindar ayuda a tu hijo en su primer paso, como ver el horizonte en el mar o simplemente apreciar el desfile de un ocaso.

Fue entonces que le hice caso a lo que me decía. me sentí tan cobarde en aquel momento; ya que ese hombre carecía de lo que yo tenía, sin embargo agradecía cada segundo de aliento.

Casi reclamando me dijo ...

V: Cuando sientas que la vida te ignora, llora pero valora mientras sonrías. Alguien decía que no siempre lloverá, en cambio siempre mañana será otro día.

Con nuevos logros y nuevas caídas, con nuevas heridas causadas y recibidas.

J: La indecisión forma parte del ser humano. Luchamos por metas que la tocarlas no nos conformamos. Decimos todo esta malo, y cuando estamos viejos nos quejamos y hablamos de los buenos años añejos

V: Irrefutable. Sí el reflejo en tu espejo no te hace feliz, o piensas que la suerte te dejo de sonreír ¿Por que´sufrir? cuando puedes oír la mejor música, la de tu corazón latir.

J: Anqué suene cursi, tienes razón. Todos hemos sentido rencor a la vida, pero si nos la quitan odiaremos la muerte enseguida...

Todo se volvió tan frio y pesado de repente . Se fueron todas las nubes del cielo, las estrellas brillaban fuertemente.  No se me ocurrió comentar más nada, además sentía como si mi cuerpo jalaran. Cuando casi decido dejarme llevar de tal  vez este sueño pesado por aquella noche disfuncional, el viejo seguía y me comentaba, mientras en su rostro un leve sonrisa se formaba.

V: Una reflexión propia te derrumba. Tan sutil para que fuese una mentira, ni hablar del fusil con el que cerraste todas tus heridas.

  Como sabiá el viejo de acometido que me traía a este banquillo... Ni que decir que me veía, porqué   de ver no sabe mas que los colores de sus palabras.

V: Mira al suelo, es tú cuerpo, Tú alma esta al costado mío a punto de recibir el determinado castigo que por supuesto lo mereces. La sutileza se acabo, Juan; las verdades son lo que creas y ahora te consumes por tu realidad aunque no lo veas.

J: ¿ Que tan real es esto? Hay tantas preguntas. Pero nadie te ha dicho que esto se siente como yo. Tú compañía me sabe real, aunque dentro de mi sabe que hay un error.

V: Sentado completamente solo, dentro de tu cabeza. Esa sangre se derrama por ti. De los mas difíciles como tú que aprecian la muerte. Cambiaste de razón y te diste tú mismo por cara de frente.

!Bienvenido al epílogo de tu vida! dramático, dramaturgo, débil y suicida. Deja de luchar, es mediocre y en vano. Déjate llevar tu ya no existes en este plano existencial.

Piérdete. pudiste ser el único, pero preferiste tener el titulo de ser solo una aventura más...











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